¡Hola de
nuevo!
Como
comenté en la entrada anterior, en junio me fui una semana a Orlando para visitar
los parques de atracciones. Hoy vengo a hablaros del primero al que fui: Animal
Kingdom.
El domingo día 4 me levanté bastante temprano para coger el primer bus que ponía el
hotel en el que me alojaba. Éste paraba en
un parking llamado Transportation and Ticket Center y, desde ahí, tenía que
coger un ferry, monorail o autobús para dirigirme a los parques (dependiendo de
cuál quería visitar, había que coger un medio de transporte u otro). Para
Animal Kingdom tuve que coger otro autobús y tardé unos 20 minutos en llegar
desde ese parking.
Una vez
allí me puse a la cola para pasar un control de registro de mochilas,
enseñé las entradas que había comprado previamente en internet y… voilà! Ya estaba dentro del parque.
Animal
Kingdom es característico por la variedad de animales que posee. Es mitad zoo,
mitad parque de atracciones. Cuando entré era tan grande y
estaba tan emocionada por verlo todo que no sabía qué hacer. Al final me hice
un planning para visitar todas las zonas y montarme en las atracciones.
La tarde
la dediqué a visitar la zona de Avatar, un nuevo mundo que abrieron a finales
de mayo. La verdad es que esta isla es impresionante, la mejor con diferencia,
y la atracción “El vuelo del Navi” fue la mejor atracción que he montado en
la vida. Espectacular. Si vais, visitadlo también de noche porque el suelo y
los decorados se iluminan.
Os dejo
aquí los vídeos para que disfrutéis mejor de este parque:
¡Hasta la
próxima entrada!